“Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse, que usa bien la palabra de verdad.”
Pablo, 2 Timoteo 2:15
A cierto punto en nuestras vidas todos tenemos que decir como vamos a vivir. Esta decisión tiene que ser intencional o al final de nuestra jornada nos daremos cuenta que perdimos muchas oportunidades. Hace varios de años atrás yo llegue a ese punto y reconocí la realidad que Dios tiene la mejor versión de mi vida en su mente y me puse completamente en sus manos.
Mi deseo es vivir de tal manera que el carácter y el corazón de Cristo sea evidente en mi diario vivir. No soy perfecto y muy seguido no logro alcanzar esta meta, pero la gracia de Dios es más grande que mis fracasos. Su amor no me condena, al contrario me restaura.
Te invito a que descubras el poder de vivir una vida bajo la autoridad y la palabra de Dios.
Bendiciones!
Josue R Reyes